miércoles, 26 de noviembre de 2008

Cortes

Supongo que el verano tiene esto, el ir de vacaciones, a la playa, darle un corte la líneas paralelas y rectas que nos marca el tiempo rutinario y mojar los suelos que estaban recién secados. A mi me gusta el verano porque se puede ir en chanclas, con los pies al aire, si no descalzo sintiendo la arena caliente hasta que corres a la toalla y buscas la más fría para contrarrestar sensibilidades, calor y frío, dulce y salado, en las tardes de playa cuando ya se va desprendiendo la arena del bochorno del día. Ellas, las chanclas, la arena, la toalla, las plantas de nuestros pies, también gustan de pasar de una línea a otra.


miércoles, 19 de noviembre de 2008

Paz


Fuiste quizás la sorpresa de aquel viaje.
Llegue a tu ciudad enamorado de sus viejos tranvías de madera, de su río, de sus edificios en decadencia, de aquel terremoto, en lo que fue la city de una parte del mundo, frontera de países, ciudades hermanas. Pero siguiendo el río, buscando una torre emblemática, siguiendo un tren moderno cargado de seguidores de tu equipo de fútbol, tanto alboroto hizo más grande tu presencia. Barrio de Belém, tu también escondes paz en tus viejos claustros.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Gusto





Donde comienza la ruta hacia el Cerro del Hierro, donde una asfaltada vía verde separa la montaña mágica preñada de grutas y rojas miradas de la zona de descanso, allí ¡oh milagro! no se nos prohibe nada, sino todo lo contrario, se nos abren las puertas a los sentidos. No a todos. Pero algo es algo.

Y sin embargo, lo que mejor me supo fue aquel bocadillo, aquellas naranjas y aquellas latas de cervezas que compartimos.

Gozad de los sentidos, no dejéis que nada ni nadie los limite, y ni siquiera permitáis que publiciten vuestra libertad. Esta y la intimidad son nuestro mayor tesoro.